martes, 2 de noviembre de 2010

NO ONE TO DEPEND ON / SANTANA



"No One To Depend On" es una canción de la banda estadounidense Santana, que fue lanzada como single en 1972 promocionando el LP Santana III (que en Argentina se conoce como "Taboo"), que es uno de los discos mas aclamados de esta influyente agrupación musical liderada por el famoso guitarrista mexicano Carlos Santana y que mezclaba de manera muy interesante los ritmos afroamericanos con tintes de rock y jazz.

En esos años y antes de entrar a grabar el Santana III la banda logró relutar a un joven de tan sólo 17 años que se llamaba Neal Schon. Este adolescente vió en Carlos Santana un buen profesor para hacer de las suyas en el rock y fue parte fundamental en los arreglos de las canciones que irían dentro del LP.
Una de esas canciones fue un instrumental escrito por los percusionistas Mike Carabello y Coke Escovedo más el tecladista Gregg Rolie. Esta peiza musical, que cotenía una amplia dosis de percusiones, tenía un llamativo e interesante "ping-pong" entre el teclado y las furiosas guitarras de Carlos y Schon, que le dá un efecto bastante rockero al tema.

Es cierto que musicalmente la canción toma algunos acordes y las ideas de "Spanish Grease", una pieza caribeña publicada en 1965 por el percusionista norteamericano Willie Bobo pero eso no quita la nota "7" que le ponemos a todo el virtuosismo que irradia esta banda dentro de esta "rola". Esto se ve muy reflejado en la introducción de la canción, donde los teclados, las guitarras y las percusiones logran una mezcla entre psicodelía fina y samba.

Otro detalle que llamó bastante la atención dentro de la canción, especialmente a los fanáticos anglosajones, fue la frase de la intro que dice "Salpica, Que caiga". Esta frase provocó varias hipotesis entre la fanaticada que no sabia mucho sobre el idioma español ni de "rumberos". Algunos pensaron que era una llamada a los demonios interiores, otros "la vendieron" como una frase ligada al consumo de drogas mientras un grupo empezó a preocuparsepor si fuera un mensaje subliminal que debía ser censurado. Menos mal que nunca fue un polémica a viva voz y los medios de comunicación andaban preocupados de otras cosas en esos años...
"Salpica, que caiga" era una frase que usaban muchos músicos afroamericanos dentro de sus canciones con el fin de darle la orden a sus músicos a que empiezen a "sentir" la melodía en sus manos. Carlos Santana tomó esa idea, y decidió incluir esa frase en el inicio de la canción como un homenaje a sus raices musicales.

La canción no logró ser un gran éxito, pero es considerada una de las piezas clásicas dentro del repertorio de la banda. Debido a que por esos años el Hard Rock y las baladas lideraban el Billboard, esta energetica experimentación de Jazz, Rock y samba logró llegar al puesto #36 del Billboard Hot 100, lo cual no era una ala señal, mientras que en el Reino Unido no alcanzó a entrar en los charts.

Una canción para bailar, purificar el alma, sentir la libertad junto al buen rock mistico en los acordes de los majestuosos ritmos de Santana.
Que la disfruten!!


1 comentario:

Mayunia Devadip dijo...

Interesante el hecho que Neal Schon y Greg Rolie formaron parte de Journey, despues de su salida de la banda Santana, pero no hay que negar que Neal Schon, a pesar de tener un sonido y estilo propio, en lo particular su forma de tocar la guitarra esta influenciada en el estilo de Carlos Santana, claro que hay distinta opiniones y asi pienso yo, aunque "No One To Depend On" de Santana 3, es todo un clasico aunque en lo particular aunque me gusta Santana 32, prefiero más Abraxas, que para mi es el disco que concentrar el mejos el estilo latino y anglo de los 3 primero disco de Santana.